Hace poco más de un mes tuve un problema con los archivos «stage» del Grub que hizo que me sea imposible entrar a Kubuntu ni Windows. Busqué por foros y salas de chat la posible solución y no pude repararlo y además como por esas fechas andaba ajustado de tiempo por un trabajo que tenía que terminar para la universidad (lo estaba desarrollando en Windows), no me quedó más remedio que poner el CD de instalación de Windows y dejar que el SO de Redmond «repare» el MBR para poder entrar y terminar el bendito trabajo.
Como ya había pasado un tiempo, no tenía muchas ganas de retomar el tema de la reparación del Grub y además este último fin de semana tuve bastante tiempo libre, aproveché para estrenar uno de los CDs de Kubuntu que hacía poco habían llegado a mi casa y reinstalar el sistema operativo (formateando la partición).
Como tengo /home en una partición separada de la raíz, no iba a ser problema (y de hecho no lo fue) el conservar mi configuración. Les comentaré mis impresiones con la instalación de Kubuntu 6.06 desde el CD y algunos consejos si es que desean conservar los usuarios y la configuración existente si es que se está reinstalando el SO, también sirve como guía si es que se está realizando una instalación nueva.
Antes tenía ya el Kubuntu 6.06 instalado pero a través de un upgrade desde la versión anterior, así que me impresionó gratamente el nuevo instalador que se tiene con (K)Ubuntu 6.06, en verdad se ve muy bien y es extremadamente amigable, incluso se puede ir haciendo otras cosas mientras se va instalando (navegar por la web por ejemplo).
El único CD que trae Kubuntu 6.06 es a la vez un live-cd y el propio instalador. Al bootear desde él, escogemos el idioma antes de empezar la carga del live-cd. Luego de cargado, tenemos un sistema operativo en el que podemos hacer bastantes cosas (si nunca has probado Linux, te recomiendo que pruebes el live-cd) aunque lo que nos interesa acá es la instalación. Para empezar la instalación, damos click al ícono que está en la parte izquierda del escritorio y se nos presenta una pantalla en la que escogemos el idioma (click en las imágenes para verlas a tamaño completo):
Luego de esto, tenemos un bonito mapamundi donde escogemos el lugar donde nos encontramos:
Luego escogemos nuestra distribución de teclado (en la parte inferior tenemos una caja de texto donde podemos probar si es que la distribución seleccionada es la correcta)
Luego ingresamos nuestro nombre, el nombre usuario, la contraseña y el nombre que queremos darle a la PC. En mi caso, puse el mismo usuario que tenía en la instalación anterior
Luego nos muestra los discos duros que tenémos en nuestra computadora, lo recomendable acá es escoger la opción de editar manualmente las particiones:
Luego tenemos la pantalla para editar nuestras particiones, esta es la parte donde tenemos que tener más cuidado.
En mi caso, ya tenía todas las particiones creadas y con el tamaño adecuado, tan sólo le indiqué que formateara mi partición «/», dejando sin cambios las demás particiones. En realidad lo que se nos muestra es el programa GParted que viene incluído en esta versión de (K)Ubuntu. Este programa es parecido al Partition Magic de Windows y nos permite redimensionar particiones, crearlas, eliminarlas, etc.
Si estás reinstalando, debes fijarte bien qué partición corresponde a cada punto de montaje (servirá para la siguiente pantalla) y formatear sólo tu partición «/» (y si tuvieses otras como /boot o /var) dejando sin cambios tu partición /home (para poder conservar los usuarios y configuración ya existente).
Si es la primera vez que instalas Linux, recomiendo tener la siguiente estructura de particiones:
- Una partición NTFS, que ya debe existir si es que ya tienes Windows. En la mayoría de instalaciones de Windows tenemos una gran partición NTFS que ocupa todo el disco duro, será necesario redimensionarla y crear las otras particiones.
- Una partición raíz (/), el sistema de archivos puede ser ext3.
- Una partición de documentos en FAT32. La idea es que podamos acceder a nuestros documentos tanto desde Windows como desde Linux. El punto acá es que Linux puede leer NTFS sin problemas, pero aún no escribe bien (debido a que es un sistema de archivos propietario y casi secreto de los amigos de Redmond) y para Windows, simplemente no existen los sistemas de archivos que usa Unix. Por eso, si es que deseas, por ejemplo escuchar un mp3 o editar un documento tanto desde Windows como desde Linux, tendrás que tenerlos en una partición FAT32. Además, así sólo vayas a tener Linux en la computadora, siempre es mejor tener nuestros documentos en una partición separada (pero en este caso escoge otro sistema de archivos, como ext3).
- Una partición SWAP para el intercambio de memoria. Esta debe ser como mínimo del doble de tamaño de la memoria RAM que tengas. Aunque si tienes 256 MB o más, es suficiente dejarla en 512MB.
- Una partición que será /home, en esta se almacenará toda la configuración de los usuarios que tengamos en el sistema operativo (algo así como el Documents and Settings de Windows) y hará nuestra vida más fácil en caso tengamos que reinstalarlo.
Luego de escoger la(s) partición(es) a formatear o de crear las nuevas particiones, pasaremos a la siguiente pantalla, en donde indicaremos los puntos de montaje de cada partición. Acá tendremos también la opción de indicar si es que queremos formatear alguna de ellas (cuidado con esto, aunque por defecto aparece desmarcada esta opción)
Si estás reinstalando, escoge la partición que formateaste como /, y las otras nómbralas como las tenías antes (para evitar que la configuración existente busque en puntos de montaje que ya no existen, aunque esto no es muy importante y puede ser arreglado luego) sobre todo la partición /home.
Si estás realizando una instalación nueva, debes tener los puntos de montaje /, swap, /home y nombrar tus otras particiones de un modo que sean fáciles de ubicar (como /media/documentos o /media/windows).
Luego de esta pantalla, se nos pedirá la confirmación para la configuración que hayamos escogido y empezará la instalación. Al reiniciar la PC, si es que has reinstalado el SO, tendrás la misma configuración que tenías antes, tan sólo es cuestión de instalar los paquetes que tenías y que no vienen con la instalación por defecto de (K)Ubuntu. Si es que has realizado una instalación nueva, tendrás un excelente sistema operativo listo para ser usado.
Como ven, la instalación de (K)Ubuntu 6.06 es bastante sencilla. Reconoce bastante hardware (tarjeta de video, red, sonido) sin necesidad de instalar drivers adicionales e incluso detecta automáticamente si es que posees una conexión a internet que usa DHCP (como Speedy) por lo que no tienes que preocuparte en configurar internet.
Algo que no me gusta en las instalaciones de (K)Ubuntu, y que pensé que habían cambiado, es que no permite escoger qué paquetes instalar, o que por defecto configura ciertos servicios para que arranquen al iniciar la computadora (algo que luego se puede cambiar), por ejemplo, me instaló lo relacionado con BlueTooth, aunque yo no tengo nada de eso acá. Supongo que lo hacen para simplificar la instalación a usuarios novatos, pero podrían hacer que al iniciar la instalación nos de a escoger una un poco más personalizada.
Luego comentaré cómo dejar nuestro sistema a punto con algunos programas y utilidades básicas, instalándolos de una forma muy fácil con Automatix.
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